El programa de DDHH surge de la necesidad de incorporar, ya de manera explícita y organizada, una mirada fundamental en la formación, desde la Psicología, coherente con los principios de una Universidad de inspiración cristiana relativa al Enfoque de Derechos. De igual forma pretende instalarse como una interfaz de articulación entre diversos actores sociales, así como en un espacio de discusión participación, investigación y vinculación con el medio local, en cuanto a la promoción, difusión y defensa de los DDHH.
Este programa depende del Departamento de Psicología de la Universidad Católica del Maule perteneciente a la Facultad de Ciencias de la Salud de la misma casa de estudios, ubicados en la ciudad de Talca, Región del Maule, en la zona Centro Sur de Chile.

lunes, 26 de noviembre de 2012

Informe Anual sobre Derechos Humanos en Chile 2012



El Centro de Derechos Humanos de la Universidad Diego Portales presentó la décima versión de su Informe Anual sobre Derechos Humanos en Chile, centrando la discusión en dos grandes temas transversales: la discriminación o exclusión arbitraria contra ciertos grupos vulnerables, y los criterios, límites y formas en la utilización de la fuerza estatal contra de miembros de la comunidad.


Descarga gratuita del Informe aquí

lunes, 5 de noviembre de 2012

Coloquio: DDHH, Medio Ambiente y Ciudad

Coloquio: DDHH, Medio Ambiente y Ciudad
1as Jornadas Regionales DDHH. UCM. 6 de Julio del 2012
Panelistas:
-Dr. © Roberto Contreras. Psicólogo Social UCM. Desarrollo Social y DDHH
-Dra. © M. Teresa Muñoz. Psicóloga de la Salud UCM. Exposición a neurotóxicos.
-Elvira Valdivieso. Socióloga. ONG Sur Maule. Reconstrucción y Ciudadanía

Coloquio: DDHH y Salud

Coloquio: DDHH y Salud
1as Jornadas Regionales de DDHH. UCM. 5 de Julio del 2012
Panelistas:
-Dra. Cecilia Olivari. Psicóloga de la Salud. UCM. Derecho a la Confidencialidad del Paciente
-Mag. (c) Andrea Cerda, Psicóloga. Coordinadora Regional PRAIS Servicio de Salud Maule. Reparación en Salud de víctimas de Violencia Política desde el Estado
-Diego Jorquera. Psicólogo. Coordinador de Red de Derechos de los Pacientes de Quillota. Experiencia de Promoción de Derechos de los Usuarios en Salud Pública

Ponencia: Dr. Nicolás Gissi

Ponencia: Dr. Nicolás Gissi. 1as Jornadas Regionales de DDHH UCM. 5 de Julio del 2012. 
  Antropólogo Social de la Universidad de Chile. Doctor en Antropología, U. Nacional Autónoma de México. Magíster en Asentamientos Humanos y Medio Ambiente PUC. Diplomado en Desarrollo. Diplomado Lingüística Mapuche. Se ha desempeñado como Asesor Sociocultural de la Fundación para la Superación de la Pobreza como también del Gabinete de la Intendencia del Gobierno Regional de la Araucanía. Profesor titular del Departamento de Sociología y Antropología de la Universidad de Concepción. "Derechos Humanos y Pueblos Indígenas en Chile: El caso Mapuche en el Siglo XXI"

Coloquio: DDHH, Diversidad e Inclusión

Coloquio: DDHH, Diversidad e Inclusión 
1as Jornadas Regionales de DDHH. UCM. 5 de Julio del 2012
Panelistas:
-Anna Kok. Teóloga. DOMODUNGU. Inclusión de la Mujer
-Vanesa Valdés. Trabajadora Social. Directora Regional SENADIS. Enfoque de  Derechos y Discapacidad
-Patricio Uribe Director regional Fundación para la Superación de la Pobreza. Inclusión Social de personas en situación de pobreza

Coloquio: DDHH Infancia y Educación

Coloquio: DDHH Infancia  y Educación
1as Joradas Regionales de DDHH. Viernes 6 de Julio del 2012
Panelistas:
-Mauricio Martínez. Estudiante UCM Ex Vocero Pleno de Presidentes UCM durante Movilización Estudiantil del 2011. Derecho a la Educación y rol del Estado como garante
-Mag. Patricia Morales. Psicóloga Educacional UCM. Convivencia Escolar y DDHH
-Mag. Juan Patricio Ponce. Sociólogo y Periodista. Política pública en infancia desde perspectiva de Derechos

Coloquio: DDHH en Contextos Penitenciarios

 
Coloquio: DDHH en Contextos Penitenciarios
1as Jornadas Regionales de DDHH. UCM 6 de Junio 2012
 
Panelistas: 
-Jaime Venegas. Abogado. Defensoría Penal Pública. Unidad de Estudios. DDHH y Ejecución Penal
-Mag. Claudio González. Abogado. Asesor Jurídico Gendarmería de Chile. Política Pública de DDHH en Prisiones
-Mag. ©Mauricio Maya. Psicólogo Clínico-Comunitario UCM. Menores en Internación como sujetos de Derechos en el ejercicio de su ciudadanía

Ponencia de Valentina Verbal. Fundación Iguales

Ponencia de Valentina Verbal. Historiadora. Magistrando en Historia U. de Chile. Coordinadora Comisión Trans de Fundación = Iguales. "Ley Antidiscriminación: Una Visión desde la Diversidad Sexual" realizada en las !as Jornadas Regionales de DDHH de la UCM, Viernes 6 de Julio del 2012

Discurso de Agradecimiento de Adriana Bórquez al recibir Premio a la Defensa de los DDHH en el Maule




Queridos amigos y amigas:

Sin falsa modestia les digo que no sé, a cabalidad, el por qué me encuentro frente a Uds.

Me siento honradísima por la invitación que me hicieron llegar a través de la voz de Harún, a participar con Uds. en la reflexión sobre Derechos Humanos y su proyección en el futuro, no sólo en nuestra sociedad, sino en el mundo de hoy y del mañana.
Hoy hemos de extender la mirada  más allá del límite que nos impusieron los acontecimientos históricos a partir de las décadas de los 50s y 60s en América Latina y desde los 70s    en nuestro país. Estuvimos tan estrangulados por la Violencia de Estado a nuestro rededor, que, entonces, carecimos de la capacidad para examinar otros aspectos de atropellos a derechos como los civiles, sociales, culturales y ambientales. La urgencia nos exigía velar por la defensa del derecho inalienable a la Vida, y la espiral de la búsqueda de nuestros Desaparecidos y Ejecutados y la sanación de nuestros Torturados no nos dejaba el tiempo ni nos permitía la visión amplia de lo que significa “Los Derechos Humanos”. Hoy ese tiempo ha llegado; es la generación del presente la que toma dichas banderas de lucha.
Este hecho nos indica, a los más viejos, que las batallas que dimos en el pasado para convertir este mundo en un sitio más justo y feliz, no estuvieron erradas ni fueron en vano. Sin ellas, hoy no podríamos estar en este salón reunidos en torno a  estos temas. Nuestra  equivocación, quizá, fue que no dimensionamos cuán cruenta sería la materialización de nuestros sueños… pero también los jóvenes de Paris invitaban a “ser realistas y soñar lo imposible”.

En vuestra Carta de Invitación, Uds. me dicen que mi – cito - “trayectoria es aliciente para los jóvenes, señala rumbos y da fuerzas para seguir esa huella y hacer de la patria un lugar donde quepan todos los sueños”. Me honran y siento que esas expresiones son inmerecidas; miren a su rededor en las calles, en las casas de los humildes de corazón, en las aulas, entre los políticos honestos – que los hay, también -, tal vez, entre los parientes más ancianos de sus propias familias: allí verán a otros miles que soñaron, hicieron, asumieron los riesgos, padecieron el castigo y sobreviven para seguir sembrando. Pero, esta vez, Uds. decidieron invitarme a mí. ¡Muchas gracias!

Sin embargo, me siento pequeña y cohibida en este lugar, aunque colmada de alegría.
Explicaré la causa de dicha ambivalencia:

Mi existencia está marcada por una tremenda lucha por vencer sus desafíos múltiples. Desde chiquita, guagua aún,  la vida me señaló para aprender a defender mi derecho a “ser persona”, y a reconocer la injusticia. A mi modo de ver el mundo, lo he logrado, aunque otros no lo entiendan o lo ignoren.

No importa, porque siento que he sido fiel a mis principios y valores, aún a costa de grandes padecimientos afectivos y vicisitudes de toda especie, a costa de sufrir deserciones, traiciones, abandonos, discriminación y aislamiento. No obstante, no cambiaría ni un átomo del camino elegido, ni de lo experimentado, porque cada paso, cada tramo andado, me permite ir por la Tierra con la frente en alto, mirar a mis hijas a los ojos – incluso a las ausentes -, así como a mis camaradas de lucha… (y a nuestros victimarios), a los humildes y a los poderosos. He tratado de ser absolutamente veraz, honesta, justa y digna – lo cual es normalmente deseable en todo miembro social,  y un deber en una opción conciente de vida. Por ende, esto, según mi criterio, no me justifica para ser distinguida – a no ser  que optar por la decencia ética sea actitud inaudita en el presente.

Esto  es una de las  razones del contrasentido que mencioné al inicio.


Esta larga historia me ha regalado un bien invaluable y bastante escaso: Libertad.

Voy a contarles en qué circunstancia de mi vida me di cuenta que era un ser libre: fue en “la parrilla” –  uno de los aparatos más degradantes y crueles del arsenal de torturas -, en el instante en que decidí – YO, libremente, aunque quebrantada al límite del dolor físico, espiritual y psicológico -  entre esquivar el martirio entregando a los compañeros de la resistencia, a la Dictadura, o si enfrentar lo que fuera, incluso la muerte, guardando silencio. Estaba cierta que el peor verdugo es nuestra propia conciencia. El miedo a que llegara el día en que debiera enfrentarla me sostuvo para seguir callando. Muchas veces se ha dicho que soy una mujer valiente. ¡Solamente yo sé cuánto miedo he sentido frente al mundo y a la vida! No obstante, porque me sé LIBRE, es que puedo decirlo sin falso pudor y sin aspavientos. Por ello, puedo permitirme despreciar el engaño escondido  bajo el manto de la mentira y la hipocresía. También es la Libertad lo que me otorga la capacidad para reconocer mis errores y fracasos y asumir esa responsabilidad. Es la Libertad lo que me ha enseñado a amar tanto en y a la vida y a darle un sentido que nos trascienda, al tratar de llegar a lo profundo de la humanidad del prójimo.


Creo  en la Esperanza. ¡A porfía!

Por una parte, nos rodea un sinnúmero de muertes: los odios personales, las rivalidades, las guerras, las hambrunas, las pestes y plagas, las catástrofes naturales, la discriminación, los prejuicios; habitamos este hermosísimo y generoso planeta ¡y lo estamos matando con nuestra codicia! También me he cruzado con uno que otro corrupto y vende-patria: usureros que han buscado usufructuar del dolor de las víctimas y los desvalidos, dejándolos en la más completa indefensión ante el poder.

Pero, en los últimos tiempos, he visto jóvenes y viejos marchando por sus causas: veo a los estudiantes, a los campesinos, a los mineros, los pescadores, a los hermanos de los pueblos originarios, a los sin-casa, a los ciudadanos, a los pobladores, exigiendo su derecho a una mejor calidad de vida, el derecho a un futuro más justo, con espacio para la felicidad y la alegría… También veo la represión ignominiosa a este pueblo -  porque está despertando del prolongado letargo en que lo sumieron el terror y la angustia durante la Dictadura, y el temor,  la apatía y la desconfianza, en la renaciente Democracia. Sin embargo,  reafirmo: “tengo fe en Chile y su destino”, haciendo eco a las palabras del Presidente Dr. Salvador Allende Gossens, porque, en los últimos tiempos, he visto “abrirse las grandes alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor”. Creo en el “Hombre Nuevo” con que soñaba el “Che Guevara”: solidario, probo, artífice de su destino.

De ahí, mi alegría.

El camino de la defensa de los Derechos Humanos no lo he hecho en solitario. En los primeros años de la Dictadura, iba acompañada desde  la sombra por los compañeros de resistencia – generosos hasta la inmolación - y por la Iglesia de los tiempos del Cardenal Don Raúl Silva Henríquez.

En el exilio sentí siempre el apoyo incondicional de organizaciones inquietas por los sucesos en Chile y preocupadas por la seguridad y bienestar del pueblo perseguido: El Chile Committee for Human Rights, Chile Solidarity Campaign, el World University Service, Amnesty International, Quakers, Universidades británicas, Iglesias de diversos credos; personas como: mi tutor académico, en la U de Oxford, Mr. George Perry, y Allan Angel; el teólogo domínico Herbert Mac Cabe, los dominicos de Blackfriars, en general – en cuyo monasterio se cobijó durante tres años nuestro Centro de Documentación e Investigación sobre Detenidos Desaparecidos en Latinoamérica “Búsqueda”, consultor para diversas divisiones internacionales de Derechos Humanos. Continúo con el Dr. Michael Ramsey, Arzobispo de Canterbury, la psicoterapista Helen Bamber – perteneciente a la Medical Foundation, que rehabilita víctimas de violaciones a sus Derechos Humanos, y que comenzó su trabajo a los 19 años, tratando a los sobrevivientes  del Holocausto, en Belsen,  Alemania. Coloco punto a una lista interminable, recordando el rol que tuvo la BBC de Londres en la denuncia de las atrocidades cometidas por los esbirros de Pinochet en los organismos creados ad hoc, así como tampoco debo dejar de nombrar al Dr. Dieter Maier – académico e investigador alemán que tanto ha aportado al desenmascaramiento de Colonia Dignidad – ni al Obispo Luterano Helmut Frenz – quien, junto a representantes de otros credos, fundó en Chile el Comité Pro-Paz, antecesor de la Vicaría de la Solidaridad.

A mi regreso a Chile – en 1985 – tuve respaldo para mi trabajo en la Comisión Chilena de Derechos Humanos, entidad con la que colaboré en Santiago, Valparaíso y Talca; así mismo,  encontré cobijo en CODEPU y en la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos. He tenido el honor de ir en esta senda de la mano de personas como el Juez Juan Guzmán, el Juez Gerardo Bernales, de abogados tales como Maritza Jara y don Roberto Celedón, y compartir la lucha por la Verdad y la Justicia con Myrna Troncoso. Han estado presentes dándome aliento Selva e Isolda – mis leales hijas -, y mis amigas – mujeres todas que, a lo largo y ancho de esta batalla me han apoyado y empujado, las que me han dado fuerzas y lucidez: Dorothy, las tres Dianas, Mary, Vibah, Wendy, Susan, Noël, en el destierro; las Hermanas de Maryknoll, en África. Todas ellas, hermanas en el género y en la causa. Todos ellos y ellas – allá en el destierro y acá en la patria - han creído en mí, quizá debido a que  mis dichos y actos han querido ser siempre consecuentes con el fruto de mi pensamiento y compromiso.

La adhesión y la defensa de los Derechos Humanos se funda, ante todo, en el RESPETO y el AMOR al “OTRO”; debemos aprender a escuchar y tolerar las diferencias, cuando no transgreden lo éticamente justo. Para ello debemos tener presente que la diversidad constituye una riqueza.

Finalmente quiero agradecer en el nombre mío vuestra deferencia, y a nombre de los millones que luchan en el mundo por ser escuchados y ser objeto de Justicia. Me honra que a través de la trayectoria de mi vida de compromiso, se dignifique y se reconozca la Historia de un pueblo - el nuestro, el pueblo Chileno. Son, ahora, Uds. quienes transitan por las “anchas alamedas”, cargando el peso de la Historia del presente para los que vendrán mañana.

He dicho. Gracias.
Adriana Bórquez Adriazola.

Talca, 5 de Julio, 2012.